De repente se apareció en el "chat". Me comentó que extrañaba nuestras pláticas. Fue tan grande la emoción que quise llamarla. La llamé. Me contestó y dijo que la llame en 10 minutos, pues estaba ocupada en otra llamada de larga distancia con su hermana. Me dijo que también estaba leyendo eso que yo llamo, mi verdad.
Insistí varias veces. El teléfono fue esquivo, ella lo levantó una vez mas, y se disculpó. Llámame en 10 minutos. Ya habían pasado 2 horas.
¿Demasiadas verdades talvez? No se. No me explico. De pronto me imagino mas de lo que es. O de pronto si es lo que no quiero que sea. Ya lo dijo alguien mas sensato: Ámame cuando menos lo merezca, ya que es cuando más lo necesito. (Un cliché útil, y muy necesario.)
La verdad es raramente pura, y nunca simple. Muy acertado, este Oscar.
Addendum:
Estaba en lo cierto. Uno descubre la verdad en los pequeños gestos...
Capítulo 116 (El Apestado)
15 years ago